NP ESCENA ESPECIAL

¿Qué pasaría si Shizui y sus hermanos conocieran a su tío Itachi?

(Ubicado en el tiempo de Nuestro Presente)

Los cuatro hermanos Uchiha-Namikaze se encontraban en una sala. Frente a ellos tenían al gran Uchiha Itachi quien los observaba fijamente. El ambiente se sentía un poco tenso hasta que el pequeño rubio, con el mismo nombre, se le abalanzó para abrazarlo.

-¡Itachi Oji-san! ¡Teníamos muchas ganas de verte!

-Gracias… -con dificultad le regresó el abrazo

-Otouto-chan, creo que lo estás asfixiando –dijo el hermano mayor

-Lo siento, me emocioné –rió el rubio dejando libre a su tío

-Nos da  mucho gusto al fin conocerte, Oji-san. Yo soy Uchiha Shizui, el primogénito.

-¿Shizui? –repitió el pelinegro con sorpresa

-Sí. Cuando Otou-san supo del sacrificio que hizo tu mejor amigo, decidió honrarlo poniéndome su nombre.

-¿Lo hizo? –sonrió con una mezcla de melancolía y gratitud- Ya veo –miró a la única chica presente-… ¿Qué hay de usted, hermosa señorita?

-Jejeje, eres todo un caballero, Oji-san. Yo soy Uchiha Miku: Mi por Mikoto Obaa-san y Ku por Kushina Obaa-chan.

-Físicamente te pareces mucho a mi Kaa-san, pero se nota que tu personalidad es de los Uzumaki –le sonrió con cariño y ahora sus ojos se posaron en cierto pelirrojo

-Namikaze Fumiya –se presentó inclinando la cabeza-. Es un placer.

-Aunque no te le pareces físicamente ni tienes su apellido, posees la misma personalidad de mi otouto. Y tu nombre es bastante peculiar.

-Es porque igual que con el de nee-san, es una combinación de varios nombres: Fu por Fugaku Ojii-san, Mi por Minato Ojii-chan y Ya por Jiraiya Ojii-san. Otou-chan quiso honrar a esos tres hombres tan importantes para él y Otou-san.

-Comprendo –le desordenó el cabello-. Es un buen nombre, hace honor al apellido que posees.

-Originalmente yo también era Uchiha, pero hace años les pedí que me dejaran cambiarlo para preservar el legado de la familia de Otou-chan.

-Eres un buen chico. ¿Y qué hay de mi pequeño rubio ojinegro?

-Mi nombre es Uchiha Itachi. ¡¡Igual que tú, Oji-san!! –volvió a abrazarlo

-¿Te pusieron el mismo nombre que yo? –preguntó de nuevo sorprendido

-¡Sí! –lo soltó para verlo a la cara y sonreírle, radiante- Porque tanto Otou-san como Otou-chan quieren y respetan mucho a Itachi Oji-san.

El mayor volvió a sonreír con una mezcla de sentimientos. Después de todo lo que hizo, no esperaba verse recompensado así. Pero que esos dos obstinados hermanos menores le pusieran su nombre a uno de sus hijos, era sin duda el mejor regalo que podría recibir.

Platicaron largo rato sobre un montón de temas distintos: sus habilidades ninja, tipos de chakra, pasatiempos, puntos débiles, cosas que odiaban, en fin. Hasta que el Uchiha mayor decidió ahondar en un tema que le llamaba mucho la atención, sobre todo si tomaba en cuenta las edades que ya tenían sus sobrinos.

-Y díganme, ¿tienen pareja?

El primero en reaccionar fue Shizui, quien asintió y sacó una fotografía de un sonriente chico pelirrojo con ojos color aguamarina.

-Éste es mi prometido: Sabaku no Yuuzuki, es el hijo menor del Kazekage. Es lindo, amable, tierno, comprensivo, dulce, simpático, cariñoso… -suspiró como chica enamorada

-¿Prometido? –repitió su tío- ¡Pero si estás muy joven!

-Shi-chan aniki salió demasiado espontáneo –aclaró Miku

-Tú no te quedas atrás, imouto.

-Cofcof –se sonrojó un poco ante la inquisidora mirada del pelilargo, así que le mostró la foto de un chico pelinegro con ojos también color aguamarina-. Él es mi novio, Sabaku no Hayate. Además de ser hijo mayor del Kazekage es un idiota exasperante, bromista, algo cínico, pero en el fondo es buena persona.

-Ahh… Veo que eligieron a ambos hermanos. Pues parecen muy buenos chicos.

-¡Y éste es el que le gusta a nii-chan!

Quién sabe de dónde, Itachi sacó una fotografía de un chico de cabello castaño algo largo y ojos color violeta semejantes a las amatistas.

-¡Nunca he dicho que Kazu-chan me guste! –gritó, sonrojándose- ¡¿Y dónde rayos conseguiste esa foto?!

-Tu reacción es bastante sospechosa, Fu-chan –reía su hermana

-No tendría nada de malo, otouto –comento Shizui-. Kazuomi es un chico agradable, alegre, enérgico, tu perfecta contraparte.

-¡¿Tú también, aniki?!

-… Ya veo –Itachi lo señaló, sonriendo-. Saliste igual que Sasuke y por eso buscaste a tu propio Naruto.

-¡Nadie ha dicho eso, Oji-san!

-Mejor resígnate –dijeron sus hermanos al mismo tiempo

-Qué sobrinos tan peculiares… Aunque no podía esperar menos con los padres que tienen.

Quizá no podría estar tan cerca de ellos para ayudarlos como a él le habría gustado, sin embargo siempre velaría por esos niños. Después de todo, eran su familia y los amaba incondicionalmente.